Rajoy y los bancos

(“Las Provincias“, 7 de mayo. 2012)

Pues va a ser verdad que cada viernes toca un numerito por parte del Gobierno, (a ver qué dice la ONCE porque lo puede considerar competencia desleal con el cuponazo). Lo que corresponde este viernes, y así lo ha anunciado Rajoy, es ayudar a los bancos con dinero público. Si fuera la primera vez alguien podría exclamar un “¡ohhh!” largo como se decía en la subasta del “Un, Dos, Tres” cuándo los concursantes se equivocaban de cortina, pero en esta ocasión llueve sobre subvencionado, de ahí la natural hartura que muestra el prudente ciudadano que asiste con pasmo a cómo se rescatan bancos a la vez que se recorta en sanidad y en educación.
Eso sí, a Rajoy nadie le gana en frescura verbal: tomará las decisiones que hagan falta aunque no le apetezca y así lo reconoce como si sufriera el síndrome de “ZP” aplicado a inquilinos recientes de la Moncloa. Llevado por una voz interior que le indica el camino Rajoy está dispuesto a acometer cuántas reformas fueran oportunas aún cargándose sus principios y poniendo en riesgo su credibilidad política. Conste que no es el único porque el recién llegado Hollande ha hecho tal pirámide de promesas que en algún peldaño se le va a estropear el asunto. La voz interior que escucha Rajoy será la misma que se dirigirá a Hollande y se admiten apuestas a que habla con acento alemán y dice llamarse Ángela. Como en “La Venganza de Don Mendo”, Rajoy puede afirmar que no fue él sino que fue “el maldito Cariñena que se apoderó de mi”.
Pero igual que el gato escarmentado de la palangana de agua tibia huye, el ciudadano recortado y objeto de subidas de impuestos se las sabe todas. En adelante cuándo alguien tenga un problema económico con su empresa lo que ha de hacer es caer redondo en la acera y pedir que vengan las asistencias, pero cuándo llegue la ambulancia rechazar su ayuda porque queremos que aparezca un coche del Banco de España a sacarnos del colapso. Es mucho mas rentable decir que eres un cajero automático en apuros que una persona física, en el primer caso te hace el boca a boca Angelina Jolie y en el segundo te toca con el feo de los Hermanos Calatrava.
No estaría mal que la comparecencia de la vicepresidenta tras el consejo de Ministros fuera en un diván porque hay medidas que sólo se pueden explicar en clave sicológica, salvo que se quiera trastornar la mente del ciudadano. Nos pasamos media vida asistiendo al rescate de la banca y luego ella no da créditos aún sabiendo de dónde ha procedido la ayuda. Si usted va a tener un hijo en las próximas fechas póngale de nombre en el Registro: 4B, así tendrá garantizado un futuro esplendoroso con ayudas de por vida. La banca nunca come de tuper, ¡Hasta ahí podríamos llegar!

Compartir:

Etiquetas: , ,

Deja una respuesta

*