La salita del Príncipe

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Se han apuntado un tanto los Príncipes de Asturias al enseñar parte del salón de su casa. Cuando mucha gente pensaba que tenían un hogar de diseño, tal vez decorado con gusto postmoderno, se les ha visto alrededor de una mesa de camilla. Seguro que la caterva monárquica saldrá diciendo que es una herejía a la institución, pero la familia española que juega al parchís y comparte la vida sobre un tapete redondo, es una familia a tener en cuenta. Esperemos que no haya sido puesta ?ad hoc? para la foto, o que forme parte de una campaña de lavado de imagen. Es más, si los Príncipes repartieran fotos suyas en la mesa de camilla, en lugar de las de uniforme con entorchados, su popularidad ganaría bastante. Estamos hartos de ver como personajes de medio pelo presumen con impudicia de unas viviendas de impresión, por lo tanto reconforta que en Zarzuela tenga como preocupación buscar un paño de Tarrasa con el que hacer unas faldas. Y, se supone que también, colocar el estratégico brasero que tantas horas de confort ha dado a la clase media española. En esa imagen entrañable hay un guiño de elogio a la república; no hay otra cosa más igualitaria que la circunferencia de una mesa de camilla. Y, allí, entre acto oficial y recepción al canto, jugarán al mus donde un as vale lo que un rey. Igual al jefe de protocolo le ha dado un pasmo pero, ahora que baja la Bolsa, los Príncipes de Asturias apuestan por el entorno de un tiempo de castañas.

Compartir:

Etiquetas: ,

Deja una respuesta

*