La última esperanza

Por: RAFAEL MARTÍNEZ-SIMANCAS

Estimado señor Rodríguez… hay que ver la que ha montado usted.Me cuentan que si abren las ventanas del centro de coordinación de campaña, en Génova, de la candidata a la Presidencia de la Comunidad, Esperanza Aguirre, se escapan sapos y culebras. Y eso que es un despacho acostumbrado a la tranquilidad de Pío García Escudero, al que han elevado (no a las alturas), pero sí de planta. La decisión de ficharle a usted, don Miguel Angel (MAR), ha sido de patada en la espinilla para los que trabajan con ella. Digamos que no son muy partidarios de que Esperanza consulte una segunda opinión. Esto es como si la NASA le construye el cohete, pero le pide un prototipo a los rusos porque no se fía.
Dirá que la primera responsable de su campaña es ella, y que está en su derecho de consultar con quien le plazca. Exacto.Pero también los demás lo están de sentirse incómodos y marginados, incluso con ataque de cuernos preelectoral. Además, no se reconoce de manera oficial la relación con usted, nadie ha firmado un contrato y nadie ha visto un papel. Sabemos que se ven, que hablan por teléfono, que quedan a deshoras. Como dirían en los pueblos: los chicos no son novios, pero se hablan. Dicen los propios que parece una muestra de debilidad no fiarse del equipo, y dicen los otros que el CIS le ha dado un susto absoluto y por eso recurre al Séptimo de Caballería, como la última esperanza. Si alguien sabe de preparar estos temas es usted, señor Rodríguez, que tiene el estatus ideal del consejero áulico: no está en política, tampoco anda tan lejos, conoce los medios y maneja la pluma con agilidad.Ideal de la muerte, doña Espe, no me diga que no.

Ella trabaja para sacarse de encima la imagen del muñegote del Plus y para romper la leyenda. Sobre todo en desmentir que nunca dijo lo de «Sara Mago» y que eso es otro de los bulos de la radio, como lo del camionero que llamaba de Torrelodones o el asunto de la empanadilla. Aunque las anécdotas tiernas, y divertidas, son las que hacen grandes a los personajes. Del mandato de Bush padre nos queda aquel momento histórico cuando echó la pota encima del primer ministro japonés. Bien pensado, Esperanza y MAR son los más simpáticos en el Guiñol. A ella le toca dejarse llevar por los consejos de usted, Rodríguez S.L., cuyo eslogan es: «Hacemos grandes a los candidatos». Aconséjela. Ella se dejará aconsejar por usted, salvo que le diga que se tiene que dejar bigote

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